A pesar de su reputación universal, el nombre Bordeaux no es sinónimo exclusivo de grandes crus. Esta tierra bendita abarca numerosos terroirs cuya diversidad permite producir un amplio abanico de vinos.
Destinado al consumo cotidiano, el Bordeaux tinto de la Collection se elabora a partir de cepas tradicionales: Cabernet Sauvignon y Merlot. Los porcentajes varían según la cosecha, pero en la mayoría de los casos, si la naturaleza así lo permite, el Cabernet Sauvignon se mantiene como cepa principal. Es ella la que aporta la elegancia y la rectitud que sellan el estilo de la “Maison”, además de una crianza y una guarda especialmente adaptadas que le aportarán encanto y cuerpo sin restarle complejidad.